miércoles, 23 de mayo de 2007

Entrevista. Ojo de Águila

“ADORO AL CONGRESO”
Por Darío Bautista

Juanita Ramírez nos cuenta su historia. Por más de la mitad de su vida ha trabajado en el Congreso de Colombia y, como nos cuenta, “le debe todo lo que tiene”.


P. ¿Cuánto tiempo llevas trabajando en el Congreso?




JR. 28 años. Comencé por abajo. Mi primer cargo fue de Ujier, que es equivalente a un empleado de servicios generales. Al menos ese fue el cargo en el que me nombraron, aunque...
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“ADORO AL CONGRESO”
Por Darío Bautista

Juanita Ramírez nos cuenta su historia. Por más de la mitad de su vida ha trabajado en el Congreso de Colombia y, como nos cuenta, “le debe todo lo que tiene”.

P. ¿Cuánto tiempo llevas trabajando en el Congreso?
JR.
28 años. Comencé por abajo. Mi primer cargo fue de Ujier, que es equivalente a un empleado de servicios generales. Al menos ese fue el cargo en el que me nombraron, aunque mi trabajo consistía en apoyar las sesiones plenarias de la Cámara de Representantes. Eso fue en el año 78. Luego me nombraron mecanotaquigrafa, porque ya estaba en la universidad. En esa época, junto al salón elíptico quedaba una oficina de mecanografía. Por las noches teníamos que quedarnos hasta que terminaba la plenaria, 11, 12 de la noche y en ocasiones hasta la 1 de la mañana, allí nos correspondía transcribir a máquina las proposiciones que realizaban los diferentes parlamentarios, las Ponencias, los Proyectos de Ley y era una oficina de apoyo a la Secretaría General de la Cámara de Representantes.

Después pasé a la Dirección Administrativa de la Cámara y me correspondía responder todas la correspondencia, incluyendo los oficios judiciales que llegaban al despacho del Director. Tenía que acudir a los profesionales adscritos a la Dirección para que emitieran un concepto frente a los diferentes casos. Luego yo preparaba las respuestas al director para que las firmara y las remitía a las diferentes instancias.

Al trasladarme de la Cámara de Representantes al Senado de la República, siendo profesional, me nombraron Periodista de la Oficina de Prensa de la Cámara Alta. Allí compartía mi tiempo entre la Oficina de Prensa, las sesiones que se adelantaban en las Comisiones , las Regiones que visitaban los Senadores para escuchar las necesidades de las comunidades y los diferentes actos que tenía que cubrir para elaborar los Boletines de Prensa y enviarlos a los diferentes Medios de Comunicación para informar sobre la labor legislativa de los Congresistas, además de manejar la oficina asignada al Senador que me apoyaba como Funcionaria del Congreso.

Por toda la experiencia que he adquirido a través de todos estos años vividos, por todas las alegrías, por los sinsabores, por toda la gente que he conocido y he tratado, quienes en su gran mayoría han sido personas maravillosas y por todo lo que tengo, gracias a Dios, son las razones por las cuales yo adoro al Congreso de la República, porque es la Institución a quien realmente después de Dios le debo lo que soy y lo que poseo. Por eso me incomoda cuando se habla mal de él. Porque aquí no sucede todo lo que se dice por fuera de él. En el Congreso se trabajo muchísimo y yo siempre lo he hecho con cariño , responsabilidad y compromiso, como lo hacen la mayoría de Congresistas y Funcionarios del Congreso.




Durante todos estos años que llevo en el Congreso, uno de los hechos que más me conmovió, fue la toma del Palacio de Justicia. Era una mañana de un día de la semana. Yo me encontraba en el Despacho del Director Administrativo, que precisamente quedaba al frente del Palacio de Justicia, cuando de repente se escucharon unos disparos. Todos salimos a las ventanas, miramos hacia el frente y no se presagiaba tanta zozobra como la ocurrida ese fatídico día. A medida que iba transcurriendo el tiempo, la situación se iba tornando más delicada y nos prohibieron por orden de la Policía que vigilaba las instalaciones del Capitolio, regresar a las ventanas para observar lo que estaba ocurriendo. De pronto nos dieron orden de evacuar la edificación alrededor de las dos de la tarde. Todos estábamos preocupados porque no sabíamos lo que sucedía afuera. Allá en el Palacio de Justicia, cuando el M-19 decidió ingresar con gran parte de sus hombres y su artillería por el Parqueadero del templo donde funcionaban las altas Cortes. Nos hacían formar en fila india, uno detrás del otro y nos cubrían con los escudos de los Agentes que nos escoltaban hasta las calles aledañas a la Casa de Nariño, donde ellos sentían que estábamos a salvo. Al tomar la Avenida sexta para alcanzar la circunvalar, a la altura de la Calle 32, mirábamos hacia el centro de la ciudad y se observaba una columna de humo gris que nos hacia sentir gran tristeza y preocupación por todas las personas que se encontraban allí dentro de la edificación. Así fue que efectivamente al encender la radio, nos enteramos de lo sucedido….. enfrentamientos entre la fuerza pública y el grupo subversivo, Muertes de grandes hombres, intelectuales, inocentes y desapariciones forzadas, además de la destrucción de las instalaciones del Templo de la Justicia que nos hacia sentir gran respeto y admiración.

P. Debe haber habido muchos cambios en el congreso desde cuando comenzaste a trabajar. ¿Cuáles recuerdas?
JR. El congreso ha cambiado mucho en estos años. Antes los congresistas aunque también legislaban, dedicaban gran parte de su tiempo a la gestión, al trabajo comunitario. Ahora, los Congresistas actuales le dan más relevancia a la investigación, a los debates, a la presentación de Proyectos de Ley, al trabajo Legislativo, que también es muy importante, ya que allí dejan plasmados el inconformismo, las necesidades, los sueños y las ilusiones de las diferentes comunidades de quienes llevan su vocería en el Congreso. Yo siempre he sostenido que un Congresista tiene que realizar un trabajo mezclado. Mitad gestión y trabajo comunitario y la otra mitad dedicarla al trabajo legislativo.




P. ¿Siempre ha habido tanta gente pidiendo favores en las Oficinas del Congreso, de aquellos que vemos siempre en la entrada y los pasillos de los Edificios del Congreso?
JR. No, antes visitaban el Congreso menos personas. Quizás porque no existían instalaciones donde funcionaran oficinas para cada Parlamentario, o tal vez por los costos de los desplazamientos a la capital. Actualmente yo pienso que existen dos razones poderosas para que se encuentren más visitantes en el Congreso. Una es la elección por circunscripción Nacional de los Senadores y la otra, la construcción en los años 80 u 82 del Edificio Nuevo del Congreso, donde tienen asignadas las Oficinas los Congresistas y allí pueden recibir los visitantes que frecuentan el Edificio regularmente los martes y miércoles que son los días que generalmente sesiona el Congreso.




P. ¿Por qué es tan importante para los Parlamentarios hacer gestión?
JR. La gran mayoría de los ciudadanos eligen sus representantes a las diferentes Corporaciones públicas, con la esperanza de lograr progreso y desarrollo para sus regiones y ellos siempre tienen la ilusión de tener su vocería en el Legislativo y esperan que tanto los Senadores como los Representantes a la Cámara que eligen, sean sus interlocutores ante el Gobierno Central, para que jalonen recursos y de esta manera adelantar obras de infraestructura en sus departamentos, específicamente en el lugar donde residen. Además, es de anotar que cuando se logra presupuesto para la ejecución de obras, el líder comunitario se siente orgulloso de no haberse equivocado con sus seguidores en la escogencia de sus representantes y se lo hacen saber a su Parlamentario por medio de una llamada, un oficio o un acto de reconocimiento comunitario.

Ahora, algunos Congresistas de varios departamentos se han agrupado, para trabajar y pedir en equipo al Gobierno Central, la inclusión de obras sentidas y compartidas por las regiones que representan, para que les concedan recursos y así poder llevarles a sus seguidores obras de gran trascendencia para las comunidades.




P. Tu has trabajado con la oposición y con el gobierno en estos 28 años, es mucho mejor estar con el gobierno
JR. Regularmente, he trabajado con el gobierno. Sólo pocas veces me ha tocado trabajar con la oposición. Trabajar con el gobierno, es como todo. Tiene sus Pro y sus Contra, porque si se logran obras, es positivo y la gente se siente feliz, pero si no se logran, la gente se siente inconforme con el Gobierno de turno y sus representantes y comentan ….que el Poder para que?, si no les conceden nada. Entonces la verdad es bien difícil tener satisfecho a todo el mundo y en la Oposición, pues se tiene al menos una razón justificada de no tener acceso a ninguna clase de concesiones, porque se adolece del poder y por consiguiente de gestión, debido a la oposición que se le hace al Gobierno Central desde el Legislativo.


P Cuál de los Ministerios es de los que más da
JR. El Ministerio de Transporte y de obras públicas es muy importante por el tema de las vías, que son tan necesarias para el desarrollo de las regiones. El de agricultura también. Cada uno tiene su trascendencia dentro del tema de su competencia. Planeación Nacional igualmente juega un papel importante, porque es la Entidad encargada de seleccionar las Obras que se van a adelantar en las diferentes regiones y es la encargada con el Ministerio de Hacienda de Elaborar los Planes de Desarrollo del Gobierno Central.




P. ¿Cuáles han sido aquellos buenos senadores y representantes que has conocido en estos 28 años?
JR. Si me pongo a recordar, al hacer un análisis y una evaluación, son muchos los que se han destacado en el Congreso y han dejado un legado muy grande para las nuevas generaciones, tanto en el campo intelectual, como en lo político. Por mencionar algunos, tenemos el caso del que fuera Representante y Senador, Jaime Ucrós García, q.p.d.. A finales de los setenta y comienzo de los ochenta. Era una persona muy inteligente, franca y sincera. El le decía al pan, pan y al vino, vino. La gente sabía a que atenerse con él porque le decía de frente se puede o no se puede y además le daba la razón de porque si era viable la solicitud o porque no. Era una de sus grandes cualidades, además de su facilidad de expresión y convicción en sus comentados debates en los que hizo rodar cabezas de Ministros y Gerentes de Institutos y actualmente el Senador GUSTAVO PETRO, por la serie de investigaciones adelantadas tanto en el Poder Ejecutivo como en el Legislativo, con las cuales lamentablemente ha puesto a tambalear el Gobierno y el Congreso.


P. Crees tú que hay comisiones mejores que otras en el congreso.
JR. Yo creo que todas las comisiones son importantes y tienen temas interesantes. Depende de los congresistas que la conformen y el trabajo que realicen en cada una de ellas.
Algunos parlamentarios le han dado trascendencia a Comisiones que antes se decía que no eran importantes como las segundas, pero actualmente, aprovechando temas como el TLC., lograron ser protagonistas de actividades interesantes que hicieron noticia nacional e internacional, convirtiéndose en un momento determinado en el centro de información para la Opinión Pública.

P. Es más difícil trabajar en una U.T.L. o ser funcionario de planta en el Congreso.
JR. Es más difícil trabajar en la UTL, porque las personas que la integran, son funcionarios de libre nombramiento y remoción, mientras que en la Planta Administrativa, se tiene un poco más de estabilidad Laboral. En Planta, las funciones que se le asignan son específicas para el cargo nombrado, en la UTL, el funcionario es todero y así como hoy esta arriba, mañana puede estar abajo y viceversa.

P. Qué tan organizados están los funcionarios del Congreso
JR. Pues existe una Asociación de Funcionarios del Congreso, llamada ASECOR, con personería jurídica, pero yo creo que eso no funciona para nada. Porque la verdad es que en el congreso no hay unidad de criterios y existen muchos intereses de los mismos políticos, que no permite que esto alcance logros laborales, porque nadie se pone de acuerdo. Yo no creo que en el país deban existir esas organizaciones sindicales, porque lo que hacen es resquebrajar completamente una institución. Yo quiero muchísimo al Congreso y no quisiera que le pasara una cosa de esas.

Taxonomía parlamentaria.

P. ¿Crees que en el congreso hay muchas corbatas?
JR. Una corbata es una persona que se nombra y no asiste al lugar de trabajo. Yo pienso, que es la persona que se dedica a esperar que le consignen el sueldo y ve pasar cada mes hasta que le llega de nuevo su remuneración. Es diferente a algunas personas que las nombran y no asisten, pero son Líderes en sus regiones y son las personas que están encargadas de llevar la vocería en cada municipio o departamento y manejan un electorado y están pendientes de las necesidades de las comunidades que representan.
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P. Qué son los manzanillos.
JR. Una persona manzanilla es aquella que solicita favores aquí y allá. Que siempre necesita algo urgente para su familia o para él. Sobretodo pide para su familia. Y pide y pide y pide para beneficio personal.

P. Qué es un lagarto
JR. Casi que es sinónimo de manzanillo. Es la persona que se la pasa en todos los cocteles, en todos los homenajes, en todos las reuniones de los políticos. Y pican aquí y pican allí y no se definen por ninguna propuesta política. En resumidas cuentas no poseen identidad política.


2 comentarios:

Anónimo dijo...

Una entrevista con muy buena factura, da cuenta de la realidad escondida, de los velos que se pierden en el barullo del diario acontecer políti... esperamos contar periodicamente con estas entrevistas

Anónimo dijo...

para un ciudadano comun, como uno. es de agrado y respeto conocer los pormenores de la actividad de esta rama del poder...el conocer a alguien que desde adentro ha visto tantas cosas, es una manera buena de apreciar el talento humano con el que contamos los colombianos para afrontar el reto de ser democraticos y mas libres