Por: Adal Ramones
¿Verdad que ser un niño consentido y quejetas es muy bonito?
Dirán: SI!!!!!!!
Pues no es cierto……eso es algo inconveniente y casón tanto para ti como para los demás. Eres como un paria y se vuelve muy maluco estar con alguien consentido y, además quejetas!!!!
Te conviertes en alguien indeseable, que por el hecho de ser sobreprotegido lo tienes todo y crees que...
Dirán: SI!!!!!!!
Pues no es cierto……eso es algo inconveniente y casón tanto para ti como para los demás. Eres como un paria y se vuelve muy maluco estar con alguien consentido y, además quejetas!!!!
Te conviertes en alguien indeseable, que por el hecho de ser sobreprotegido lo tienes todo y crees que...
Por: Adal Ramones
¿Verdad que ser un niño consentido y quejetas es muy bonito?
Dirán: SI!!!!!!!
Pues no es cierto……eso es algo inconveniente y casón tanto para ti como para los demás. Eres como un paria y se vuelve muy maluco estar con alguien consentido y, además quejetas!!!!
Te conviertes en alguien indeseable, que por el hecho de ser sobreprotegido lo tienes todo y crees que puedes pasar por encima de los demás. Es así como cuando uno ve a un niño llorando en una esquina y le pregunta preocupado: “amiguito….que te pasó, por qué lloras?” …… “es que mi tío me pegó”……. “pero por qué?”..... “Es que estaba haciendo lo mismo que usted está haciendo ahora, metiéndome en lo que no me importa”.
Así te comportas cuando eres un consentido……eres un convencido y en la mayoría de las ocasiones algo arrogante. De esto me di cuenta en la plenaria del Senado, cuando al senador del Polo, Jorge Enrique Robledo, al comienzo de la plenaria pedía la palabra pero el presidente (en ese momento se encontraba Plinio Olano) no le prestaba atención. Después de varias intervenciones en contra del Alcalde Garzón y del partido por parte del resto de parlamentarios, el Senador Robledo seguía pidiendo la palabra.
Hacia rabietas, gritaba pero no lo escuchaban, hasta que llego Gustavo Petro; Robledo no lo dejo acabarse de sentar cuando lo llamó para darle las quejas, me imagino que diría algo como “mire que no me dejan hablar” “quiero hablar!!!!!” “ayúdeme, haga rápido algo por favor”, daba la impresión que estaba haciendo una rabieta de niño consentido.
Eso no es conveniente, porque si eres toda la vida así, siempre serás el lazarillo, el discípulo de alguien, no surgirás ni te respetarán, serás un quejetas. Te dedicarás a protestar, no como se debe, sino por medio de otros que podrían ser idénticos a ti, serás un niño llorón.
Además esa actitud es la culpable para que personajes como Uribe salgan elegidos, porque tienen detrás un sin número de discípulos y de personas que siempre acudieron a él. El era como el papá y así se siente, por eso es que hoy en día él es un personaje mesiánico, el rey, el todo, el salvador.
Entonces no seamos más quejetas, tomemos las riendas nosotros mismos y evitemos alimentar las necesidades de grandeza de los otros. No es conveniente esa relación paternalista, donde existe un héroe, un salvador. Es mejor buscar una cooperación (entre iguales) y no una asistencia (como la relación hijo- padre)
No seamos cómplices del surgimiento de nuevos héroes mesiánicos! De supuestos Pro-hombres.
Dirán: SI!!!!!!!
Pues no es cierto……eso es algo inconveniente y casón tanto para ti como para los demás. Eres como un paria y se vuelve muy maluco estar con alguien consentido y, además quejetas!!!!
Te conviertes en alguien indeseable, que por el hecho de ser sobreprotegido lo tienes todo y crees que puedes pasar por encima de los demás. Es así como cuando uno ve a un niño llorando en una esquina y le pregunta preocupado: “amiguito….que te pasó, por qué lloras?” …… “es que mi tío me pegó”……. “pero por qué?”..... “Es que estaba haciendo lo mismo que usted está haciendo ahora, metiéndome en lo que no me importa”.
Así te comportas cuando eres un consentido……eres un convencido y en la mayoría de las ocasiones algo arrogante. De esto me di cuenta en la plenaria del Senado, cuando al senador del Polo, Jorge Enrique Robledo, al comienzo de la plenaria pedía la palabra pero el presidente (en ese momento se encontraba Plinio Olano) no le prestaba atención. Después de varias intervenciones en contra del Alcalde Garzón y del partido por parte del resto de parlamentarios, el Senador Robledo seguía pidiendo la palabra.
Hacia rabietas, gritaba pero no lo escuchaban, hasta que llego Gustavo Petro; Robledo no lo dejo acabarse de sentar cuando lo llamó para darle las quejas, me imagino que diría algo como “mire que no me dejan hablar” “quiero hablar!!!!!” “ayúdeme, haga rápido algo por favor”, daba la impresión que estaba haciendo una rabieta de niño consentido.
Eso no es conveniente, porque si eres toda la vida así, siempre serás el lazarillo, el discípulo de alguien, no surgirás ni te respetarán, serás un quejetas. Te dedicarás a protestar, no como se debe, sino por medio de otros que podrían ser idénticos a ti, serás un niño llorón.
Además esa actitud es la culpable para que personajes como Uribe salgan elegidos, porque tienen detrás un sin número de discípulos y de personas que siempre acudieron a él. El era como el papá y así se siente, por eso es que hoy en día él es un personaje mesiánico, el rey, el todo, el salvador.
Entonces no seamos más quejetas, tomemos las riendas nosotros mismos y evitemos alimentar las necesidades de grandeza de los otros. No es conveniente esa relación paternalista, donde existe un héroe, un salvador. Es mejor buscar una cooperación (entre iguales) y no una asistencia (como la relación hijo- padre)
No seamos cómplices del surgimiento de nuevos héroes mesiánicos! De supuestos Pro-hombres.
2 comentarios:
Seamos concientes de que como parasitos lo unico qeu hacemos es crear mas males. Metamole cinco de criterio, cinco de compromiso, cinco de cojones para actuar por cmbiar lo qeu creemos que no funciona. Dejemos de pensar qeu la solucion la tiene el del lado. Si no no vaos a salir nunca de este hueco
Los congresistas sienten emociones encontradas cuando tienen un berrinche. Por un lado sienten la frustración y la ira, pero también sienten la vergüenza y la tristeza. Más que nada, ellos sienten una falta de control y una imposibilidad para comunicar sus emociones. Ellos quieren ser escuchados y quieren mostrar a todo el mundo los frustrados que están, será este el futuro que siempre nos espera?
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